lunes, 27 de febrero de 2012

Entrevista con Ricardo Bosque, escritor

Publicamos en Lector-e una entrevista con Ricardo Bosque, autor, entre otras novelas, de Cuestión de Galones, una de las lecturas que mejor sabor de boca me dejó el año pasado.




Ricardo, en primer lugar darte la bienvenida a Lector-e y agradecerte que tan amablemente vayas a responder a nuestras preguntas. Empezamos hablando de ti, conociéndote un poco mejor.

Cuéntanos a qué te dedicas aparte de escribir y cuáles son tus aficiones.

Gracias a vosotros por someterme a este interrogatorio del que intentaré salir lo más airoso posible. ¿Mi ocupación principal, la que me da de comer? Desde hace ya diecisiete años -cómo pasa el tiempo- soy funcionario de la administración local, con un horario de mañana que me permite disponer de parte de las tardes, la parte libre que me dejan las obligaciones familiares, para hacer lo que me gusta: leer, escribir y trastear por la red. Una cerveza bien fría acompañada de un purito en los momentos de mayor tranquilidad también podría considerarse como una de mis aficiones favoritas.

¿Cómo surge la afición por la escritura y cuánto tiempo hace de aquello?

Creo que en esto de escribir es donde se debe cumplir indefectiblemente lo de ser cocinero antes que fraile. Vaya, que detrás de un escritor, bueno o malo, tiene que haber necesariamente un buen lector. Y el lector, normalmente, se hace en la infancia y ahí me recuerdo comprando tebeos de Mortadelo cada semana en la papelería de la esquina, merendando pastel de jengibre -que nunca supe bien lo que era- con los Cinco o visitando cada sábado una librería de viejo del Tubo zaragozano ya desaparecida hace años.

La afición por la escritura es mucho más reciente, de poco antes de publicar mi primera novela allá por el año 2000. Muchos escritores dicen que ya de niños escribían cuentos en sus ratos libres, en mi caso jamás gané un concurso de redacciones -creo que solo participé en uno y obligado por el colegio- y mis ratos libres los ocupaba jugando en la calle a lo que surgiera.

¿Hay alguna lectura o autor que haya sido decisivo para que te decidieras a escribir?

Más que para decidirme a escribir, yo diría que para decidirme sobre qué escribir: aquello que me gustaba leer. Y, como digo en mi perfil de Google+, “desde que a los 15 años Cosecha roja me mordió, tengo el mono el día que no leo algo de novela negra”. Aunque creo que Hammett no fue realmente el primero en morderme desde aquella mítica colección en formato pulp del Club del Misterio de Bruguera; si hago memoria, un tal Poe también tuvo mucha culpa en mi afición por el género criminal.

Y en cuanto a las lecturas que creo me encaminaron hacia cómo escribir, creo que siempre quise ser como Donald Westlake. Nunca lo conseguiré, pero por intentarlo...

¿Cuánto tiempo dedicas a la escritura?

Difícil de responder. Trato de ponerme todas o casi todas las noches aunque sea una hora, más algunos ratos que voy sacando de donde puedo. En ese tiempo, evidentemente, incluyo no solo el que dedico a la redacción en sí sino también a la preparación de la estructura, de los personajes, la búsqueda de datos que necesite en un momento determinado... Eso sí, sobre todo si lo que estoy haciendo es una novela, necesito regularidad: poco tiempo si no dispongo de más pero que sea todos los días.

¿Por qué, para qué y para quién escribe Ricardo Bosque?

Por qué y para qué tendrían la misma respuesta: por diversión, ya que no se gana dinero al menos no pasarlo mal con lo que haces, eso sería masoquismo y yo me quiero mucho. ¿Para quién? Pues no es que uno vaya buscando un segmento de mercado determinado, creo que, como he dicho antes, escribo lo que me gustaría leer, o sea que imagino que escribo para mí. Si luego hay mucha gente que coincide con mis gustos, miel sobre hojuelas, que tampoco es llegar a aquellos extremos de los Parálisis Permanente cuando decían eso de “leo libros que no entiendo más que yo y oigo cintas que he grabado con mi voz”.

Son ya varios los libros que has publicado. ¿Te consideras escritor?

Al principio, incluso cuando iba por el segundo o tercero, me daba algo de pudor utilizar esa palabra: por pintar mi casa no me considero pintor ni por cambiar un grifo, fontanero. Pero habiendo llegado al cuarto y con unas cuantas aportaciones a antologías de relatos... Además, si quien te lee se refiere a uno como escritor, ¿por qué llevarles la contraria? Así que la respuesta debería ser sí, a tiempo parcial, pero escritor.

¿Cuántas veces se te ha pasado por la cabeza la idea de poder vivir de la escritura?

Creo que el hecho de haber empezado a escribir tarde me ha ayudado a mantener los pies en el suelo y la cabeza libre de pájaros, consciente de que, salvo cuatro privilegiados, nadie vive de esto. Incluso quienes puede parecer que sí lo hacen, en realidad se suelen mantener de lo que yo llamo efectos colaterales de la escritura: columnas semanales en diarios y suplementos, colaboraciones en radio, crítica... Así que la realidad se impone y no, jamás se me ha pasado semejante idea por la cabeza. Hombre, no digo yo que alguna noche de tragos lo haya podido pensar, pero nada más.

¿Es complicado publicar hoy en día?

Por ahí dicen que en muchas actividades es más fácil llegar que mantenerse. En la escritura, y sobre todo al principio, lleva más tiempo conseguir editorial que el que has dedicado a escribir la novela. Tiempo y dinero, con decenas de envíos a editoriales que amable y diplomáticamente te desean suerte porque escribes bien pero tu libro no encaja en su línea editorial. Luego lees algunos libros de los que editan y te felicitas por no encajar en su línea editorial.

Me imagino que a las medianas y grandes editoriales no tienes acceso salvo que vayas de la mano de un agente y te cuelen junto a la contratación de otro autor con el mismo representante. Y las editoriales pequeñas no suelen disponer de recursos económicos para enfrentarse al riesgo que supone editar a un perfecto desconocido que, además, será horriblemente distribuido. Hasta que llegó la revolución digital, que facilita, por un lado, la autoedición y, por otro, que editoriales con menos recursos pero buen ojo para esto de las letras puedan apostar por quien responda a sus gustos al margen de otras consideraciones empresariales.

Tu última novela está publicada con Literatura con Libros, pero ¿te has llegado a plantear en algún momento la autoedición?

Pienso que cada cual debe dedicarse a lo suyo, el escritor a escribir y el editor a editar. Y esa labor editorial supone una serie de cometidos que considero imprescindibles, como el consejo sobre aspectos a modificar dentro de la novela, todo el proceso de corrección y maquetación, la puesta a disposición de los diferentes puntos de venta y, en el caso de los ebooks, la preparación de los correspondientes archivos electrónicos perfectamente legibles en cada uno de los diferentes dispositivos de lectura existentes.

Pero es que, además, considero que aunque la edición digital permite eliminar eslabones de la cadena entre escritor y lector, el editor debe seguir presente por el valor añadido que aporta: la garantía de que lo que el lector va a comprar ha pasado unos filtros de calidad literaria -algo siempre subjetivo, por supuesto- y formal, es decir, que el libro está correctamente maquetado y listo para su lectura.

En cualquier caso, me parece una opción personal perfectamente válida y respetable aunque no me la haya planteado por el momento. Pero, claro, nunca digas de este agua no beberé ni este cura no es mi padre...

¿Qué tal han sido tus relaciones con las editoriales?

La primera quebró, aunque mi novela no era tan mala, lo juro. Con la segunda, Mira Editores, relación correcta en todos los sentidos. Además, apostaron por una novela rechazada en todas partes como si padeciera lepra, así que hay que estarles agradecido. Con la tercera, Literaturas con Libros, nos estamos conociendo, como dicen los famosos sobre sus romances. Pero creo que vamos a encajar muy bien, sus planteamientos coinciden de lleno con los míos en lo que debe ser el libro digital y eso constituye un buen punto de partida.

Supongo que cuando alguien te hace una crítica positiva de tu libro la alegría debe ser inmensa, pero qué ocurre cuando alguien te dice que no le ha gustado, que no merece la pena... ¿Te queda un regusto amargo? ¿Piensas si de verdad merece la pena...?

Debo de ser un tipo afortunado o la gente es más educada de lo que creemos, porque las reseñas de mis novelas suelen ser bastante positivas aunque puedan criticar negativamente algún aspecto puntual. Así que me imagino que aquellos a quienes no les gusta -que los habrá, seguro- simplemente son educados y no quieren meter el dedo en la llaga o prefieren no perder el tiempo hablando de algo que consideran malo.

De hecho, creo que será esto último: al menos, desde mi actividad como crítico suelo escribir exclusivamente de aquello que me ha gustado; de los libros que ni fu ni fa no suelo hablar y de aquellos en los que no he podido pasar de las 20 o 30 páginas, mejor ni mentarlos.

En todo caso, si las hubiere, creo que mi elevada autoestima serviría de cortafuegos. Debe de ser porque me quedé sin abuelas muy joven y todos los piropos me los he tenido que decir yo mismo desde mi más tierna infancia.

¿No crees que también tiene algo de positivo para un escritor recibir una mala crítica o crees que es preferible ni siquiera hablar de su libro?

No sé, cada escritor es un mundo y hay quienes reciben las críticas como algo que les puede ayudar a mejorar y otros que se las toman como una afrenta personal. En todo caso, y haciendo referencia a mis propias novelas, si bien como digo no han recibido públicamente y después de editadas esas críticas negativas, sí han podido recibirlas en las fases previas a su entrega a la editorial correspondiente, pues tengo por costumbre confiar en tres o cuatro amigos y excelentes lectores a los que pido lean el original y sean lo más despiadados posible. Es decir, que olviden que son amigos y se conviertan en críticos, educados pero feroces.

También tienes un blog -más de uno-, ¿qué podemos encontrar allí?
Dices bien, son al menos tres los que actualizo con cierta regularidad. Dos de ellos responden a mi gusto por el género criminal: La Balacera (http://balacera.wordpress.com/), en la que recojo la actualidad del género (novedades editoriales, entrevistas en todo tipo de medios, presentaciones...) y Calibre .38 (http://revistacalibre38.wordpress.com/), revista digital que edito y dirijo y en la que algo más de una docena de locos por los crímenes de papel reseñamos las novelas que vamos leyendo -y, como decía antes, nos gustan de verdad- además de publicar algunos relatos, artículos, entrevistas...

El tercero es mi blog personal (http://ricardobosque.wordpress.com/), y ahí el contenido es más ecléctico aunque suelo hablar también de libros, de algunos tebeos o de series que me gustan además de utilizarlo como medio en el que ir publicando las novedades que pueda haber en mi actividad literaria.

Supongo que todo buen escritor tiene que ser un gran lector. ¿Dispones de lector electrónico? ¿Prefieres la lectura en papel?¿Lees más desde que tienes lector?
Efectivamente, dedico mucho más tiempo a leer que a escribir. A veces pienso que esto es como lo de cocinar, que te pegas la mañana entre fogones y luego das buena cuenta del resultado en cuestión de minutos.

Más o menos suelo leer cerca de cien novelas al año -ojo, aquí incluyo algunas de esas que abandono a las 20 o 30 páginas- y tengo lector electrónico desde agosto de 2011. Desde entonces diría que el noventa por ciento de mis lecturas -y creo que sí, que estoy leyendo más- son en formato electrónico, me resulta más cómodo. Siempre me he considerado un tipo más práctico que romántico, así que jamás he dicho eso del placer del olor del papel y todas esas cosas. De hecho, me hace gracia porque cuando oigo o leo declaraciones similares siempre me acuerdo de lo que se decía al principio de la música en CD o mp3, ensalzando el ruidito de la aguja sobre el vinilo como si aquello fuera el mayor de los placeres o algo que venía incluido en la partitura original.

Supongo que la llegada de Amazon a España nos ha facilitado bastante las cosas porque parece que esto se empieza a mover, pero te es fácil llegar a libros electrónicos o tienes que recurrir a “caminos alternativos”?
Como llevo poco iempo en este mundillo, mi experiencia en compras o en descargas alternativas es escasa. Sí te diré que he recurrido a esos caminos alternativos para leer libros que difícilmente puedes encontrar en una librería, textos descatalogados que solo se encuentran en librerías de saldo o mercadillos benéficos.

Pero la verdad es que resulta bastante frustrante querer comprar un ebook porque estás habituado a este formato electrónico y ver que no existe o que pretenden tomarte por idiota, pidiéndote por él prácticamente lo mismo que por su versión impresa. He llegado a ver un título que ya tiene los mismos años que yo, que han regalado con algún periódico y que se pretende vender por doce euros en ebook. ¿Estamos tontos o qué? Ganas me han dado de descargármelo por la cara a pesar de tenerlo ya en casa en tres o cuatro versiones diferentes, todas ellas impresas y pagadas.

Sin embargo, algo se está moviendo, en efecto, y ya empieza a haber editores y autores que ponen sus libros a precios muy razonables e incluso sin dispositivos anticopia que resultan a todas luces un estorbo inútil. Creo que es el camino, el buen camino. O el único camino posible, tal vez: disponibilidad en las webs autorizadas, buen precio -aprovechemos el comportamiento a veces compulsivo de los lectores internautas- y facilidad de descarga deberían de ser las armas para luchar contra esos caminos alternativos.

Enlaces de interés relacionados con el autor:
La Balacera: http://balacera.wordpress.com/
Revista Calibre 38: http://revistacalibre38.wordpress.com/
Blog personal de Ricardo: http://ricardobosque.wordpress.com/
El último avión a Lisboa: http://elultimoavionalisboa.wordpress.com/
Libros de Ricardo en Amazon: http://www.amazon.es/s?_encoding=UTF8&search-alias=stripbooks&field-author=Ricardo%20BOSQUE
Página de Facebook: https://www.facebook.com/ricardobosquepalacin
Pagina de Google+: https://plus.google.com/106202021785545320418/posts
Twitter: http://twitter.com/ricardo_bosque


2 comentarios:

  1. Me encantó esta entrevista, una buena forma de conocer quién está detrás de La Balacera o Calibre.38 (mis páginas negras favoritas) Un placer conocerte Ricardo y espero que alguna vez alguno de tus libros lleguén a Uruguay, porque me encantaría leer algo de ti. Saludos desde Montevideo, Uruguay
    Alessandra

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  2. Gracias, Alessandra, encantado de conocerte también. En cuanto a lo de mis libros en Uruguay, lo veo difícil en el formato impreso. Pero mi última novela (Cuestión de galones) ha salido como ebook y, por tanto, disponible desde cualquier lugar del mundo. Y, aunque no hay nada seguro, es probable que mis dos novelas anteriores (Manda flores a mi entierro y Suicidio a crédito) tengan verión electrónica próximamente.
    Gracias otra vez, Alessandra

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