Estas navidades, dando una vuelta por una librería, vi un libro (nada extraño en este tipo de negocios) con una especie de icono en la portada, como los que se salían en el televisor cuando mi hermano jugaba a los marcianitos con el Spectrum (por si acaso: era un ordenador de cuando todavía funcionaban con la manivela). No he sido nunca un vicioso de estos juegos peeero...
Sinopsis (Texto de contracubierta): Estamos en el año 2044 y, como el resto de la humanidad, Wade Watts prefiere mil veces el videojuego de OASIS al cada vez más sombrío mundo real. Se asegura que esconde las diabólicas piezas de un rompecabezas cuya resolución conduce a una fortuna incalculable. Las claves del enigma están basadas en la cultura de finales del siglo XX y, durante años, millones de humanos han intentado dar con ellas, sin éxito. De repente, Wade logra resolver el primer rompecabezas del premio, y, a partir de ese momento, debe competir contra miles de jugadores para conseguir el trofeo. La única forma de sobrevivir es ganar; pero para hacerlo tendrá que abandonar su existencia virtual y enfrentarse a la vida y al amor en el mundo real, del que siempre ha intentado escapar.
Opinión personal: Ligera, ligera... pero con gancho. La verdad es que tenía mis dudas por que pasaba por ser una novela juvenil, pero engancha incluso a los que no hemos jugado con el ordenador más de veinte veces en la vida.
No es que sea una maravilla, la trama tiene sus buenos boquetes y el estilo es llano. Pero está escrita con ritmo y todo ese cine y esa música de los ochenta que aparece página sí, página también... ¡qué buenos recuerdos! Y son todas esas citas de aquel periodo las que me llevan a dudar sobre el supuesto público juvenil al que va dirigido el libro, las que me hacen sospechar que l@s presunt@s "jovencit@s" a los que va dirigida la novela son de es@s que se preguntan de dónde habrán llegado todos esos pelos que tienen instalados sobre las orejas o (alternativa) por qué de repente deben acortarse los tirantes del sujetador todas las semanas. Una novela muy recomendable para pasar un buen rato, más si entiendes qué se significa “el palabro” geek... y te recuerda a alguien.
Valoración personal: 3,5 sobre 5
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